El fin de semana pasado estuve en un día de campo con amigos.
Surgió el tema de Google y de cómo el SEO rompió internet.
Cito:
“Antes, cuando buscabas la receta de tortilla de patatas, te salía el blog de un friki de las tortillas de patatas. Ahora te sale cualquier cosa financiada por una marca”.
Conclusión: antes internet era un lugar guay para encontrar información de calidad.
Ahora el contenido que aparece en los primeros puestos es una caca de elefante.
Yo creo que hasta Google llegó a la misma conclusión de la gran caca hace unos meses.
Por eso, metió mano en el algoritmo.
Para evitar las opiniones de producto que apestan a granja de bots, decidió darles más protagonismo a los viejos foros.
Y se pasó tres pueblos.
Sacó de la ultratumba a páginas como Reddit o Forocoches.
El dueño HTCMania (un foro de productos electrónicos) está saltando en una pata porque el tráfico les creció 40%, de la nada.
Una locura.
Pero bueno, aquí no estamos para quejarnos de Google ni para fundar el partido Make Internet Great Again.
Acá estamos para sacarle tajada a las decisiones que toman allá lejos, en Silicon Valley.
***
“A río revuelto, ganancia del pescador”
Los pequeños negocios son los supuestos beneficiarios de esta medida, la del algoritmo de Google.
Así que hay que tratar de aprovecharla.
Marie Haynes, una súper especialista en SEO de Canadá, recomendó esta estrategia:
Yo revisaría cada correo electrónico y trataría de recordar cada llamada telefónica para hacer una lista de las preguntas que realmente hacen los clientes.
También indagaría qué preguntas tienen sobre el producto cuya respuesta no pudieron encontrar en línea.
Luego tomaría esa información y la dividiría en temas para publicar en el blog.
Agrego: escribir sin usar demasiada IA, porque puede ser penalizada.
***
En resumen, el algoritmo de Google no es ni amigo ni enemigo de nadie.
Es una música a la que hay que seguirle el ritmo.
Si quieres que te ayude con el baile, clic aquí.
Deja una respuesta